Se acaba el verano, ¿Y ahora qué? Esta es una de las preguntas que más nos planteamos una vez comprobamos cómo se van acercando las últimas semanas del verano. Hoy abordaremos algunas de las claves para encontrar trabajo después del verano que quizá te interese conocer y aplicar.
Mientras que para unos el verano es la época del año en la que pueden desconectar de sus responsabilidades profesionales y disfrutar de sus merecidas vacaciones, para muchos otros, los meses de junio, julio y agosto son una oportunidad para conseguir un empleo que les permita seguir percibiendo ingresos y alivie su situación económica.
El fin del verano es una de las épocas donde más desempleo se genera
Con la finalización de las vacaciones de unos, llegan los problemas del resto. Las vacaciones que muchos disfrutan son atendidas por otros que han tenido la oportunidad de volver al mercado laboral y ganarse un sueldo.
Sin embargo, España es un país claramente enfocado al sector servicios y turístico. Aquí las vacaciones del resto del mundo son el sustento principal de millones de personas que trabajan exclusivamente en proporcionarles un servicio o producto de ocio.
Con la llegada de septiembre, la situación se agrava. Los restaurantes, cafeterías, hoteles y demás elementos turísticos y de ocio del país ven reducidas sus plantillas, lo que se traduce en la finalización de muchos contratos.
Aunque, salvando épocas pandémicas, los meses de verano siempre han sido etapas de prosperidad y oportunidades, miles de personas se ven abocadas de nuevo a tratar de conseguir otro empleo con el que subsistir el resto del año.
Septiembre, a encontrar trabajo después del verano
Lo primero que debes saber es que la indiferencia o inmovilidad no son una opción. Si quieres encontrar trabajo después del verano es fundamental que te mantengas activo y valores todas las opciones que tienes a tu alcance. Así como los medios que dispones.
Los lamentos están bien para unos minutos, para darnos cuenta de que tenemos que poner de nuestra parte para revertir la situación. Pero han de ser eliminados de la ecuación cuanto antes si lo que buscas es conseguir mantenerte activo/a en el mercado laboral, independientemente del mes que sea.
Por lo tanto, busca ofertas de trabajo, accede a los diferentes portales de empleo y asegúrate de tener cubierto y controlado todo el sector al que deseas acceder. Es decir, si trabajabas en unos grandes almacenes, quizá sea buena idea inscribirse en todas las cadenas de supermercados, tiendas de bricolaje y similares. Recuerda que las empresas valoran mucho la experiencia, y tú la tienes.
Lo siguiente que debes tener controlado es tu carta de presentación, aunque en España no sea imprescindible, siempre conviene tenerla a punto y preparada para que noten la diferencia cuando tratan contigo.
Lo mismo sucede con el currículum, ha de estar actualizado y perfectamente estructurado. De esta forma podrán conocerte al detalle y saber exactamente cuál es tu formación, así como experiencia. Si necesitas ayuda sobre cómo redactarlo, aquí tienes toda la información necesaria.
Motivación y optimismo de cara a las entrevistas de trabajo
No hay nada peor que una persona desmotivada enfrente nuestra. Imagina que eres tú la persona que se encarga de entrevistar a los nuevos candidatos, ¿Te seduce la idea de contratar a alguien que viene con los hombros caídos en actitud derrotista?
La imagen hace mucho y tú debes trabajarla, así como la predisposición por aceptar nuevos retos y mostrar siempre una sonrisa que incite al departamento de Recursos Humanos a querer tenerte en su plantilla.
Encontrar trabajo después del verano es una tarea que requiere de tu voluntad, pero no deja de ser una etapa del año más. Dependerá de tu preparación y predisposición para conseguir un puesto lo antes posible. ¡Adelante!