Formular objetivos: La fórmula SMART para establecer objetivos claros

La fórmula SMART es la más utilizada a nivel empresarial para establecer objetivos, aunque puede utilizarse para prácticamente todo en la vida: Conseguir un nuevo coche, El puesto de trabajo soñado, terminar la carrera, etc.

Pero no vasta solo con pensar en lo que quieres conseguir, también debes establecer algunas condiciones para que ese objetivo sea realmente SMART.

A nivel empresarial, si le das a tus empleados los siguientes objetivos para lograrlos: “Incrementar las ventas, incrementar las ganancias, reducir los costos, realizar inversiones, orientación al cliente, satisfacción del empleado”, entonces no debería sorprenderte que estos objetivos no se logren. Es necesario aprender a formular metas.

Pero los objetivos SMART no son solo para que nuestros jefes nos establezcan los logros que debemos conseguir, saber la formula SMART nos ayuda como empleados a que nuestros objetivos estén bien definidos, sean claros y contengan la información necesaria para que podamos cumplirlos.

¿Qué es un objetivo?

Aquí es donde a menudo comienza el dilema gerencial, en muchos casos las intenciones, deseos, esperanzas o sueños se confunden con objetivos.

Para algunos ejecutivos, los empleados necesitan habilidades clarividentes para saber a qué se refiere un objetivo o una tarea. Entonces, ¿cuál es la diferencia entre objetivos o metas y las intenciones, hermosos deseos y vagas esperanzas? ¿Qué hace que un objetivo sea realmente un objetivo?

Formular objetivos concretos, medibles y factibles.

Los objetivos deben formularse de forma «inteligente» y luego sentar las bases para el éxito de tu liderazgo.

El término es una abreviatura estadounidense y las letras “SMART” en ingles significan:

• Specific: específico
• Measurable: medible
• Achievable: realizable
• Realistic: realista
• Time: Tiempo

Por lo tanto, se trata de formular objetivos inteligentes con tus empleados o cuando es a ti a quien definen estos objetivos.

Un objetivo como los que mencionábamos al comienzo de este articulo del tipo “Aumentar las ventas” te puede llevar como empleado a preguntarte: ¿En cuánto hay que aumentar las ventas? Si vendo 1€ más que antes ¿he cumplido mi objetivo? ¿Cuánto tiempo tengo para cumplirlo? ¿1 mes? ¿1 año?

En cambio, un objetivo SMART podría ser: “Aumentar las ventas de la Línea X en un 10% (En comparación con los últimos 6 meses) antes del 30 de junio aprovechando la campaña publicitaria”.

Ahora vamos a analizar este objetivo:

• Specific: Aumentar las ventas de la Línea X
• Measurable: En un 10%, Se pueden comparar resultados con los últimos 6 meses
• Achievable: La campaña publicitaria puede ayudar a conseguirlo
• Realistic: ¿Es posible conseguirlo?
• Time: Antes del 30 de junio

Este objetivo es específico, es medible, también es realista, por lo que este 10% debe ser alcanzable. La fecha límite para alcanzar la meta está fijada para el 30 de junio, por lo que también se fija la meta.

Crea objetivos con la fórmula SMART

Cuando creas tus objetivos, asegúrate de no formularlos de acuerdo con el patrón “Tenemos que mejorar”, sino que sus acuerdos de destino son “SMART”:

El objetivo debe especificar (Specific) el punto en el que desea comenzar, por ejemplo: “Tenemos que optimizar nuestra cooperación para que funcione sin problemas”.

Tu objetivo debe ser mensurable: “Nuestro objetivo es aumentar la producción entre un ocho y un doce por ciento a través de una mejor cooperación”. Esto es más fácil con metas cuantitativas que con metas cualitativas. Pero también con los objetivos cualitativos, asegúrate de que el éxito sea medible: “La satisfacción del cliente debería aumentar hasta tal punto que las quejas caigan al tres por ciento”.

Los empleados deben aceptar el acuerdo del objetivo y comprometerse con el objetivo. Puedes lograr esto involucrando a tus empleados en el proceso de establecimiento de objetivos: Obtén asesoramiento sobre lo que es factible y permite que tus empleados participen en la decisión, por ejemplo, en forma de una selección de varias alternativas.

Tu objetivo debe ser Realista. Si este no es el caso, no podrás lograr que tus empleados se comprometan con el acuerdo objetivo. Las metas poco realistas tienen un efecto desmotivador porque el empleado no tiene la sensación de que sus esfuerzos puedan conducir al éxito en absoluto.

Tu objetivo también debe estar cronometrado o tener una fecha para cumplirse. Tu objetivo solo se puede medir cuando hay un momento en el que debe lograrse. Por lo tanto, establezca siempre un tiempo de medición: “Para el cambio de año, las ventas deberían haber aumentado en un diez por ciento gracias a la mejora en nuestros servicios de consultoría”.

Ejemplos de la fórmula SMART

• Mal: Quiero bajar de peso
• Bueno: A partir del 01/05 comenzare el gimnasio para perder 5 kilos en menos de 2 meses

• Mal: Las partes interesadas deben estar informadas.
• Bueno: Todas las partes interesadas marcadas con prioridad A, deben recibir un informe de estado de 2 páginas con información sobre el objetivo, el estado real del proyecto y las actividades actuales por correo electrónico al final de cada mes.

• Mal:  Mejor usabilidad.
• Mejor: La usabilidad del software es calificada como “muy buena” por al menos el 90% de los participantes en una prueba de usabilidad.

• Mal:  Aumento de las ventas
• Mejor: Las ventas brutas en la categoría de productos “sombreros de mujer” deben aumentar en el segundo trimestre del año en al menos un 15% en comparación con el año anterior.

• Mal:  Cumplimiento del presupuesto
• Mejor: No superar el presupuesto del proyecto de 100.000 euros.

Como puedes ver, los objetivos SMART son una forma de establecer objetivos en beneficio de la empresa, pero lo mas importante es que como empleado puedes saber ¿Cuál es el objetivo? ¿Saber en que punto de cumplimiento estas? ¿Si realmente es posible cumplirlo? Y ¿Cuánto tiempo te queda para cumplirlo?